Así que decidí realizar un escrito para homenajear a grandes de México que se fueron en este año, y que por ellos muchos gritamos VIVA MEXICO!
Carlos Monsivais, Chavela Vargas, Carlos Fuentes y quien
recientemente partió Ernesto de la
Peña.
Personas que sin duda pusieron muy en alto el nombre de
México, que día a día vivieron con el orgullo de serlo y aportando su ser en
sus distintas obras para nuestro país.
“Chavela Vargas hizo del abandono y la desolación una catedral en la que cabíamos todos y de la que se salía reconciliado con los propios errores, y dispuesto a seguir cometiéndolos, a intentarlo de nuevo”.
Cuando cumplió 92
años, dijo que mientras viviera no dejaría de crear. “La creación no termina si uno sigue vivo”. Y prometió que el tiempo que le quedara de vida
seguiría creando.
Chavela un total ejemplo
de admirar. En lo particular, me encanta la canción de Joaquín Sabina "Noches de Boda" cantada con Chavela.
Aquí les dejo la letra.
Aquí les dejo la letra.
Que el maquillaje no apague tu risa,
Que el equipaje no lastre tus alas,
Que el calendario no venga con prisas,
Que el diccionario detenga las balas,
Que las persianas corrijan la aurora,
Que gane el quiero la guerra del puedo,
Que los que esperan no cuenten las horas,
Que los que matan se mueran de miedo.
Que el fin del mundo te pille bailando,
Que el escenario me tiña las canas,
Que nunca sepas ni cómo, ni cuándo,
Ni ciento volando, ni ayer ni mañana
Que el corazón no se pase de moda,
Que los otoños te doren la piel,
Que cada noche sea noche de bodas,
Que no se ponga la luna de miel.
Que todas las noches sean noches de boda,
Que todas las lunas sean lunas de miel.
Que las verdades no tengan complejos,
Que las mentiras parezcan mentira,
Que no te den la razón los espejos,
Que te aproveche mirar lo que miras.
Que no se ocupe de ti el desamparo,
Que cada cena sea tu última cena,
Que ser valiente no salga tan caro,
Que ser cobarde no valga la pena.
Que no te compren por menos de nada,
Que no te vendan amor sin espinas,
Que no te duerman con cuentos de hadas,
Que no te cierren el bar de la esquina.
Que el corazón no se pase de moda,
Que los otoños te doren la piel,
Que cada noche sea noche de bodas,
Que no se ponga la luna de miel.
Que todas las noches sean noches de boda,
Que todas las lunas sean lunas de miel.
Que el equipaje no lastre tus alas,
Que el calendario no venga con prisas,
Que el diccionario detenga las balas,
Que las persianas corrijan la aurora,
Que gane el quiero la guerra del puedo,
Que los que esperan no cuenten las horas,
Que los que matan se mueran de miedo.
Que el fin del mundo te pille bailando,
Que el escenario me tiña las canas,
Que nunca sepas ni cómo, ni cuándo,
Ni ciento volando, ni ayer ni mañana
Que el corazón no se pase de moda,
Que los otoños te doren la piel,
Que cada noche sea noche de bodas,
Que no se ponga la luna de miel.
Que todas las noches sean noches de boda,
Que todas las lunas sean lunas de miel.
Que las verdades no tengan complejos,
Que las mentiras parezcan mentira,
Que no te den la razón los espejos,
Que te aproveche mirar lo que miras.
Que no se ocupe de ti el desamparo,
Que cada cena sea tu última cena,
Que ser valiente no salga tan caro,
Que ser cobarde no valga la pena.
Que no te compren por menos de nada,
Que no te vendan amor sin espinas,
Que no te duerman con cuentos de hadas,
Que no te cierren el bar de la esquina.
Que el corazón no se pase de moda,
Que los otoños te doren la piel,
Que cada noche sea noche de bodas,
Que no se ponga la luna de miel.
Que todas las noches sean noches de boda,
Que todas las lunas sean lunas de miel.
CARLOS MONSIVAIS. Alguien que no solo se interesó en las bellas artes sino
también en la cultura popular dentro del cine, los cómics y artesanías.
Personaje central de nuestro México contemporáneo. Cronista
mayor de la realidad mexicana, cinéfilo, coleccionista, GATÓFILO, crítico
social, voraz lector, autor fundamental; militante de entrañables causas
perdidas, maestro de ceremonias de un país a la deriva.
Un hombre “aparentemente serio, pero con un enorme sentido del humor, con una ironía muy fina”,
“No hay territorio cultural o periodístico que no pase por la ubicuidad extravagante, desordenada, voraz y abarcadora de Monsiváis; sin duda, una presencia central”, mencionó el también escritor Rafael Pérez Gay.
“Monsiváis nos quitó la vergüenza de ser mexicanos del siglo
XX. Nos dio el lenguaje para explicarnos; no es el único, pero sí uno de los
más importantes”
Alejandro Brito Lemus, director de Letra S y amigo de Monsiváis nos dice que; “hacía juegos de palabras, le cambiaba el nombre a las
personas, siempre estaba buscando el lado humorístico, pero también se
indignaba frente a las injusticias y movía a sus amigos a hacer algo, ya fuera
publicando una carta en los periódicos o yendo a los medios.”
Destacó su capacidad de indignarse ante las injusticias, además de su típico humor y la manera de escuchar siempre dando su opinión más objetiva, sobre todo en estos tiempos que tanta falta nos hace a los mexicanos indignarnos, suceden injusticias a nuestro alrededor que pocas veces nos damos cuenta.
Por su parte CARLOS FUENTES, se distinguió por su sentido
crítico hacia el amor, la muerte y la
política.
A pesar de no nacer en México y de no vivir aquí hasta los
16 años su nacionalidad fue mexicana,
ganó innumerables premios además de ser candidato en varias ocasiones al
Premio Nobel de Literatura.
De sus principales obras se encuentran: Aura y La Muerte de Artemio Cruz, entrando en el llamado Boom
Latinoamericano
“...desventurado país que a cada generación tiene que destruir a los antiguos poseedores y sustituirlos por nuevos amos, tan rapaces y ambiciosos como los anteriores. ”
Toda gran obra literaria nos propone la salvación mínima de
la palabra. Toda gran obra literaria nos propone imaginar. Tenemos un pasado
que debemos recordar. Tenemos un porvenir que podemos desear.
“¿La creación está inconclusa? Si. Y éste es el requisito
por donde, inevitablemente, Dios se me cuela al mundo. Si Dios nos hizo a su
imagen y semejanza, ¿Dios contiene el mal humano? Yo contesto, si. Somos
reflejo también de la parte mala o inconclusa de Dios. Obramos para completar a
Dios”.
“No existe la libertad, sino la búsqueda de la libertad, y
esa búsqueda es la que nos hace libres”.